Background Image
Table of Contents Table of Contents
Previous Page  24 / 36 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 24 / 36 Next Page
Page Background

24

Elige 3 ó 4 momentos del día para practicar los ejer-

cicios de forma sistemática y regular, para que baje

tu nivel general de activación y vayas automatizando

esta habilidad de modo que puedas utilizarla cuando

la necesites en situaciones de mucha tensión

Despuésde losprimerosensayoses conveniente realizar

el ejercicio en situaciones que te provoquen malestar

Hablarnos de un modo más positivo para sentir-

nos mejor

Todo el mundo habla consigo mismo de forma perma-

nente, aunque habitualmente no estemos pendientes

de lo que nos decimos. Nuestros diálogos internos tie-

nen mucho que ver con nuestros sentimientos y con

nuestro modo de actuar.

Si nos decimos “me estoy volviendo loco, mi vida se ha

echado a perder, nunca volveré a disfrutar de nada ni

de nadie”, me sentiré muy mal, asustado, triste y deses-

peranzado; y es posible que no saque fuerzas ni para

levantarme de la cama o salir a la calle. Pero si me digo

“estas reacciones son muy desagradables, pero son nor-

males, poco a poco me iré recuperando; tal vez nunca

pueda estar como antes, pero quiero estar mejor de lo

que estoy ahora”, es posible que me sienta más espe-

ranzado y dispuesto a hacer cosas para mejorar.

Las frases que nos decimos son determinantes para lo

que sentimos y hacemos, por eso cuando tengas que

enfrentarte a una situación que te genera malestar,

trata de hablarte de un modo más positivo:

¿CÓMO HABLARNOS DE UN MODO MÁS POSITIVO?

Si estás en una situación y te sientes mal, utiliza en tu

diálogo interno instrucciones positivas que no empeo-

ren la situación. Puedes decir: “todo irá bien”, “será

un rato poco agradable pero luego pasará”, “puedo

estar tranquilo, situaciones más difíciles he pasado a

estas alturas”, “no hace falta hacerlo perfecto, pero

voy a hacerlo”, “tal vez aprenderé de esto”, etc.

Trata de dirigir tu diálogo hacia los objetivos de lo

que vas a hacer, hacia lo que quieres conseguir en

esta situación determinada. Puedes decir: “lo impor-

tante es curarme las heridas y aquí estoy para eso”.

Procura no centrar demasiado tu diálogo en tus

emociones y en cómo eres o no eres, diciéndote:

“soy un cobarde, me estoy poniendo enfermo, me

voy a desmayar”.

Si el malestar continúa trata de averiguar si estás

manteniendo un diálogo negativo: “me estoy ponien-

do fatal”, “no voy a poder”, “no valgo para esto”, y en

caso de que así sea, trata de conducir tu diálogo de

forma más positiva.

Cuando anticipes que una situación determinada te

va a generar malestar, comienza a prestar atención

a tu diálogo interno antes de estar en ella, pues es

más fácil establecer un diálogo positivo desde el

principio.

Después de pasar la situación debes dedicar un tiem-

po a sentirte orgulloso por haberla superado y elo-

giar tus logros: “lo he conseguido”, “me ha costado

mucho esfuerzo pero lo he hecho, soy un valiente,

soy capaz de muchas cosas”. Atiende a los aspectos

que has conseguido, aunque no haya sido un éxito

al cien por cien.